Algunos de los derechos más importantes que tenemos actualmente en nuestra sociedad, son los que consideran la igualdad entre el hombre y la mujer. Si empezamos por la educación, no hay duda de que es importante que las mujeres tengan las mismas oportunidades en cuanto a estudios y becas que el Estado pueda otorgarle, pero es lamentable que todavía en el año 2007 existan familias que le digan a sus hijas: “Tu nada mas hasta la secundaria, porque tu hermano es el que va a estudiar la prepa”, y eso pasa incluso cuando el hermano tiene menores conocimientos y habilidades para salir adelante en sus estudios, que su hermana, que a lo mejor le dedico más esmero a la escuela pero por ser la mujer no se le otorga la oportunidad.
Aunque no solo en su propio hogar se les sigue excluyendo a algunas mujeres, el abrirse paso en el ámbito laboral es en donde se centra el mayor problema que las esta afectando, basta con solo recordar que hace quizás una década (o menos) era muy difícil encontrar buenas ofertas de trabajo, ya que sus opciones eran muy reducidas y mal pagadas, sobre todo si pertenecían a la clase media o para abajo, prácticamente se reducía a tres opciones:
1-Empleada doméstica o ama de casa (algunas mujeres sienten que es lo mismo).
2-Secretaria u otro puesto menor dentro de una empresa, desde la intendencia hasta trabajos en maquiladoras o en algún restaurante o cafetería, en donde el crecimiento laboral era nulo y con el peligro de no poder embarazarse porque por lo general estarían firmando su acta de abandono.
3-Se la dejo a su imaginación.
Sin embargo, para el bien de la sociedad esto esta cambiando, hoy en día las oportunidades de trabajo para las mujeres se han abierto en comparación a hace 10 años, y para muestra solo nos queda mirar al sur con Bachelet y próximamente al norte con Hillary, claro en México esos cambios se dan poco a poco pero ya comenzó en la cámara de diputados.
Pero no todo es felicidad, todavía queda un gran problema y mayor obstáculo para ellas, que es la discriminación dentro del lugar de trabajo. Por lo general en las empresas los ejecutivos llegan a sentirse amenazados ahora que ya saben que alguna ejecutiva puede estar mejor preparada y con mejores ideas. Al darse cuenta de eso algunos se ponen nerviosos y piensan - “¿Como es posible que una ejecutiva de 27 años que no tiene familia y lleva menos de la cuarta parte de lo que yo he trabajado para esta empresa, tenga más posibilidades de ascender de puesto que yo?”-. Y es justamente ahí cuando se les empieza a hacer la vida imposible. Es triste que en algunos lugares esto sea el detonador para quererles meter el pie dentro de una empresa o se les amedrente mediante la discriminación, los acosos e insultos que sufren solo por el hecho de ser mujer y poder destacar en nuestra sociedad.
Y es que quedar a la sombra de una mujer es muy grave para muchos, debido a la manera en que la sociedad ha sido educada desde hace siglos en donde se acostumbró a creer que por decreto el que debe tener las oportunidades es el hombre, en vez de la persona más capaz, sin importar de que género sea.
Hoy en día las mujeres están preparándose para ser mejores y deben de darles un trato digno, al menos en su casa, empezando por sus padres, el marido, el hermano y toda la sociedad en conjunto. Porque en muchos casos, tampoco se le toma en cuenta para la toma de decisiones dentro del hogar y se le tiene relegada en un segundo plano, como si fuera el adorno más bonito de la casa. Es una pena el enterarse de hechos tan indignantes que todos los días, durante todo el año, en todas las noticias de cualquier canal (y prácticamente de cualquier estado de la República), hay mínimo tres o más noticias de violencia intrafamiliar en las que las victimas son mujeres.
Para todos los problemas que den como resultado la violación de estos derechos, existen organizaciones que les brindan ayuda y apoyo a las mujeres, las informan y no las dejan solas. Lo único que tienen que hacer es decidirse a denunciar todas estas irregularidades que existen y violan sus derechos como si no existieran.
Aunque no solo en su propio hogar se les sigue excluyendo a algunas mujeres, el abrirse paso en el ámbito laboral es en donde se centra el mayor problema que las esta afectando, basta con solo recordar que hace quizás una década (o menos) era muy difícil encontrar buenas ofertas de trabajo, ya que sus opciones eran muy reducidas y mal pagadas, sobre todo si pertenecían a la clase media o para abajo, prácticamente se reducía a tres opciones:
1-Empleada doméstica o ama de casa (algunas mujeres sienten que es lo mismo).
2-Secretaria u otro puesto menor dentro de una empresa, desde la intendencia hasta trabajos en maquiladoras o en algún restaurante o cafetería, en donde el crecimiento laboral era nulo y con el peligro de no poder embarazarse porque por lo general estarían firmando su acta de abandono.
3-Se la dejo a su imaginación.
Sin embargo, para el bien de la sociedad esto esta cambiando, hoy en día las oportunidades de trabajo para las mujeres se han abierto en comparación a hace 10 años, y para muestra solo nos queda mirar al sur con Bachelet y próximamente al norte con Hillary, claro en México esos cambios se dan poco a poco pero ya comenzó en la cámara de diputados.
Pero no todo es felicidad, todavía queda un gran problema y mayor obstáculo para ellas, que es la discriminación dentro del lugar de trabajo. Por lo general en las empresas los ejecutivos llegan a sentirse amenazados ahora que ya saben que alguna ejecutiva puede estar mejor preparada y con mejores ideas. Al darse cuenta de eso algunos se ponen nerviosos y piensan - “¿Como es posible que una ejecutiva de 27 años que no tiene familia y lleva menos de la cuarta parte de lo que yo he trabajado para esta empresa, tenga más posibilidades de ascender de puesto que yo?”-. Y es justamente ahí cuando se les empieza a hacer la vida imposible. Es triste que en algunos lugares esto sea el detonador para quererles meter el pie dentro de una empresa o se les amedrente mediante la discriminación, los acosos e insultos que sufren solo por el hecho de ser mujer y poder destacar en nuestra sociedad.
Y es que quedar a la sombra de una mujer es muy grave para muchos, debido a la manera en que la sociedad ha sido educada desde hace siglos en donde se acostumbró a creer que por decreto el que debe tener las oportunidades es el hombre, en vez de la persona más capaz, sin importar de que género sea.
Hoy en día las mujeres están preparándose para ser mejores y deben de darles un trato digno, al menos en su casa, empezando por sus padres, el marido, el hermano y toda la sociedad en conjunto. Porque en muchos casos, tampoco se le toma en cuenta para la toma de decisiones dentro del hogar y se le tiene relegada en un segundo plano, como si fuera el adorno más bonito de la casa. Es una pena el enterarse de hechos tan indignantes que todos los días, durante todo el año, en todas las noticias de cualquier canal (y prácticamente de cualquier estado de la República), hay mínimo tres o más noticias de violencia intrafamiliar en las que las victimas son mujeres.
Para todos los problemas que den como resultado la violación de estos derechos, existen organizaciones que les brindan ayuda y apoyo a las mujeres, las informan y no las dejan solas. Lo único que tienen que hacer es decidirse a denunciar todas estas irregularidades que existen y violan sus derechos como si no existieran.
-*AHF-
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